A pesar de que se haya popularizado la idea de que los drones pueden ser manipulados o manejados por cualquier persona, no es una práctica legal en la gran mayoría de los países. No se trata de un artefacto netamente recreacional, razón por la cual se ha edificado paulatinamente una serie de normas y reglamentos que buscan regular el uso de este tipo de dispositivos con el fin de mejorar las prácticas.
La intención de este tipo de normativas es la de reducir la posibilidad de accidentes así como prevenir los inconvenientes en materia laboral relacionados con la eficiencia durante el uso de drones.
¿Qué características y conocimientos debe adquirir el operador?
Además de contar con una licencia que le permita conducir en espacios aéreos restringidos por la ley de aviación, el operador de dron está capacitado para un manejo completo y eficaz de todo tipo de drones. Generalmente, para convertirse en un operador de dron ha tenido que pasar por pruebas físicas y médicas que certifican su estado óptimo.
Sumado a ello, tendrá que tener aptitudes validadas para leer mapas topográficos y con gran sentido del espacio para ubicarse con rapidez. La velocidad de respuesta frente a situaciones inesperadas y la correcta planificación son valores que hacen destacar al profesional encargado de manejar un dron. Pues uno de los aspectos vitales a la hora de planificar un vuelo es realizar un estudio previo del terreno en cuestión, así como de las condiciones climáticas para prever cualquier inconveniente y asegurar el éxito en los proyectos.
¿Qué documentación necesito para volar?
Estar registrado como piloto frente a las autoridades pertinentes y también contar con un seguro que lo cubra en caso de accidentes con el equipo de trabajo. Vale destacar que debe contarse con la mayoría de edad para poder pilotar estos aparatos. Específicamente cuando se trata de volar un dron con fines comerciales tendrá que cumplirse lo siguiente:
- Es necesario recibir la aprobación de la ANAC (Administración Nacional de Aviación Civil) como miembro de la tripulación remota.
- También un manual de operaciones y un sistema de gestión de riesgos.
- El dron debe tener una placa de registro obligatoria.
Sumado a la documentación, debe estar delimitado el espacio aéreo sobre el que se volará el cual debe estar, como mínimo, a 30 metros de distancia de civiles. El dron no podrá superar los 122 metros de altura y no podrá operar por debajo de los 10 metros. En casos en los que se requiera pilotar el dron en zonas restringidas, es necesario que se solicite un permiso especial solicitado ante la ANAC explicando los motivos.
¿Qué tipos de drones existen y cuales son los más utilizados?
Los drones pueden clasificarse según su función, su cantidad de hélices o el medio por el que suelen desplazarse y el rango de distancia que son capaces de alcanzar. En ese sentido los podemos definir de la siguiente manera.
Función
Uso civil: Generalmente fabricados con materiales más ligeros e integrados con tecnología diversa para satisfacer mayor número de necesidades. Estos drones suele ser muy completos y ofrecen gran rendimiento, pues está diseñados para disminuir la posibilidad de accidentes y brindar una experiencia de usuario ideal. El precio de estos equipos es superior al de otro tipo de dron.
Uso militar: Aunque por definición son drones equipados para el combate, sus usos van más allá. Son utilizados para enviar provisiones hasta lugares de difícil acceso y para rastrear personas y asistir tras accidentes o desastres naturales. Están elaborados de materiales sumamente resistentes y son manejados a través de un programa remoto.
Tipo de alas
Ala rotatoria: Estos son los modelos más comunes y mayormente popularizados. Según la cantidad de hélices que tengan se clasifican en: tricópteros (3 motores), cuadricópteros (4 motores), hexacópteros (6 motores) y octacópteros (8 motores) que son los más poderosos en el aire.
Ala fija: Aunque son menos habituales, son ideales para realizar mapas de zonas grandes, pues brindan gran autonomía al aprovechar su aerodinámica para disminuir el gasto energético. La desventaja principal de estos drones es que no pueden mantenerse fijos en un punto y tampoco puede despegar por sí solos.
Tipo de ambientes para el que están diseñados
Además de la clasificación anterior, un dron también puede ser definido por las características del terreno o las zonas donde puede ser utilizado. En ese sentido, los encontramos aéreos, marítimos (sumergibles) y terrestres.
Según el rango
Los podemos encontrar desde un rango mínimo que no supera los 5 km (kilómetros), también mediando rango, que va desde 50 km hasta los 150 km y finalmente lo de mayor alcance que pueden llegar hasta los 650 km de distancia.
Contratación de dron programados (parametrizado)
Para contratar un dron y definir los costes de presupuestos hace falta tener claro los objetivos del proyecto para el que se utilizará. En la gran mayoría de los casos, el monto por los servicios de manejo de dron se calculan por hectárea. Aunque es un valor que no se encuentra fijado, también pudiera recibirse un presupuesto por la cantidad de horas de vuelo.
En gran medida, estos servicios también pueden definirse por los conocimientos del operador y por la necesidad del contrato. En el caso de mapas geográficos u otros estudios especializados también pudiera verse afectado el precio por los honorarios.
Pero no es solo el operador de dron el involucrado en el presupuesto. También hay que considerar al topógrafo, en caso de que sea necesario, así como el alquiler de software para vaciar los datos captados por el dron.
Metodología de trabajo y presupuesto, distancia, valor agregado
La forma habitual de trabajar con servicios de manejo de dron es con una buena planificación elaborada por el operador y en consonancia con el resto del equipo. Como no existe una tarifa fija para elaborar el presupuesto, depende mucho de la negociación y el acuerdo verbal que se establezca.
Es necesario considerar de antemano la mayor cantidad de detalles al respecto. Debido a que puede darse el caso en el que el dron no alcance las expectativas del estudio y, por tanto, halla que dividir el trabajo en fases. Lo ideal es que se comuniquen y definan todos los detalles para aumentar la eficiencia y velocidad de los resultados.
En cuanto al valor agregado, la resolución de la cámara integrada en el dron puede marcar una diferencia notable. De igual manera, la experiencia y el conocimiento especializado en el manejo por parte del operador pudiera ayudar a conseguir resultados óptimos y más cercanos a los objetivos.